Era muy distinto a lo que había imaginado, sentí una gran decepción, toda la vida tratando de imaginar este gran momento; y al fin sucedía, pero no sentía aquello que tanto deseaba. No se que ocurrió pero algo cambio dentro de mi, de inmediato me aparte de los demás y me senté sobre una roca a contemplar el paisaje...era hermoso, muy hermoso, pero yo ya no era el mismo...
Ese mar de siete colores trataba de hablarme como aquel amigo que quiere darte ánimos en un momento de tristeza. La cabaña de alquiler era preciosa; pero no era mi estilo, toda tallada en fina madera, como una pequeña obra de arte, con grandes ventanales, lo cual le daba una iluminación perfecta a la casa, muebles rusticos, lamparas de vitrales con cierto estilo clásico, además de un bello pórtico, en el cual se podía leer en bella letra tallada a mano: "Welcome Home"
Inmerso en mis pensamientos, escuche unos pasos tras de mi, Sofía había notado mi extraño carácter, pero ella me conocía, creo que mejor de lo que yo me conocía a mi mismo, toco mi cabeza con sus suaves manos y sentí una gran paz interior; era como si sus dedos se fundieran en mi cabello.
- No pensaras ir, verdad; me dijo.
-Me temo que es algo tarde para eso.
-Tenia que hacer algo al respecto, replicaba ella.
Esos instantes de regocijo fueron intensos y duraderos; me sentí lleno de valor y con pasos decididos camine hacia mi destino; antes de saltar, volví a verla, estaba iluminada como una diosa. Salte con todas mis fuerzas, era una montaña de mas de 500 metros, la caída fue de infinito placer, sentí la vida pasar en esos segundos; antes de chocar mire por ultima vez a Sofía, pero la imagen de esa mujer amada ya no se veía en lo alto de la Cima.
El Choque fue violento, pero me devolvió la vida, fue como si me hubiese unido con ese elemento extraño, descubrí que aquel letrero en la cabaña era una sentencia - "Welcome Home" -. El Agua era mi hogar.
*Cuento inspirado por Sergio Aguirre y los Paisajes de Las Islas Phi Phi.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario